Salmo 119:57-64 NVI

Salmo 119:57-64

¡Mi herencia eres tú, Señor!

Prometo obedecer tus palabras.

Busco tu rostro de todo corazón;

ten piedad de mí conforme a tu promesa.

Me he puesto a pensar en mis caminos,

y he vuelto mis pasos hacia tus mandatos.

Me doy prisa, no tardo nada

para cumplir tus mandamientos.

Aunque los lazos de los malvados me aprisionen,

yo no me olvido de tu Ley.

A medianoche me levanto a darte gracias

por tus justas leyes.

Soy amigo de todos los que te honran,

de todos los que observan tus preceptos.

De tu gran amor, Señor, está llena la tierra:

enséñame tus estatutos.

Tet

Read More of Salmo 119