2 Reyes 16 – NVI & HOF

Nueva Versión Internacional

2 Reyes 16:1-20

Acaz, rey de Judá

16:1-202Cr 28:1-27

1En el año diecisiete del reinado de Pécaj, hijo de Remalías, Acaz hijo de Jotán comenzó a reinar en Judá. 2Tenía veinte años cuando comenzó a reinar; reinó en Jerusalén dieciséis años. Pero, a diferencia de su antepasado David, Acaz no hizo lo que agrada al Señor su Dios. 3Al contrario, siguió el mal ejemplo de los reyes de Israel, y hasta sacrificó en el fuego a su hijo, según las repugnantes ceremonias de las naciones que el Señor había expulsado al paso de los israelitas. 4También ofrecía sacrificios y quemaba incienso en los altares paganos, en las colinas y bajo todo árbol frondoso.

5En cierta ocasión, Rezín, rey de Aram, y Pécaj, hijo de Remalías, rey de Israel, marcharon hacia Jerusalén para hacerle guerra a Acaz y sitiaron la ciudad, pero no lograron tomarla. 6Por aquel tiempo, Rezín, rey de Aram, había reconquistado la ciudad de Elat, desalojando a los de Judá que vivían allí. Posteriormente los edomitas se establecieron en Elat y allí se han quedado hasta el día de hoy.

7Acaz envió entonces mensajeros a Tiglat Piléser, rey de Asiria, con este mensaje: «Ya que soy tu servidor y vasallo,16:7 vasallo. Lit. hijo. Es un término que en las relaciones diplomáticas de la época denota la aceptación de la autoridad y la sumisión. ven y líbrame del poder del rey de Aram y del rey de Israel, que se han puesto en mi contra». 8Acaz también juntó la plata y el oro que había en el Templo del Señor y en el tesoro del palacio real, y se lo envió todo al rey de Asiria como un regalo. 9El rey de Asiria, accediendo a su petición, lanzó un ataque contra Damasco y conquistó la ciudad. Luego deportó a sus habitantes a Quir y mató a Rezín.

10El rey Acaz fue entonces a Damasco para encontrarse con Tiglat Piléser, rey de Asiria. Cuando vio el altar que había en la ciudad, el rey Acaz envió al sacerdote Urías un plano del altar, con un dibujo de todos los detalles. 11Entonces Urías construyó un altar según las instrucciones que el rey Acaz había enviado desde Damasco y lo terminó antes de que el rey regresara. 12Cuando el rey llegó de Damasco y vio el altar, se acercó y presentó allí una ofrenda. 13Ofreció el holocausto con la ofrenda, derramó su ofrenda líquida y roció sobre el altar la sangre de los sacrificios de comunión. 14El altar de bronce, que estaba en la presencia del Señor, lo retiró de la parte delantera del edificio y lo situó en el lado norte del nuevo altar, ya que ahora quedaba entre el nuevo altar y el Templo del Señor.

15Luego dio estas órdenes al sacerdote Urías: «Ofrece en este gran altar el holocausto matutino y la ofrenda vespertina, así como el holocausto y la ofrenda del rey, y también los holocaustos, las ofrendas y las ofrendas líquidas del pueblo en general. Rocía sobre este altar la sangre de todos los holocaustos y sacrificios. Pero el altar de bronce lo usaré yo para buscar orientación». 16Y el sacerdote Urías hizo todo lo que el rey Acaz ordenó.

17El rey desmontó los paneles de las bases y les quitó los recipientes; además bajó la fuente16:17 la fuente. Lit. el mar. que estaba encima de los bueyes de bronce y la instaló sobre un enlosado de piedra. 18Luego, por deferencia al rey de Asiria, quitó del Templo del Señor el techado que se había construido allí para celebrar los sábados,16:18 el techado … sábados. Alt. el estrado para el trono (véase LXX). así como la entrada exterior para el rey.

19Los demás acontecimientos del reinado de Acaz están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Judá. 20Acaz murió y fue sepultado con sus antepasados en la Ciudad de David. Su hijo Ezequías lo sucedió en el trono.

Hoffnung für Alle

2. Könige 16:1-20

König Ahas von Juda

(2. Chronik 28,1‒4)

1Ahas, Jotams Sohn, wurde König von Juda im 17. Regierungsjahr Pekachs, des Sohnes von Remalja. 2Ahas wurde mit 20 Jahren König und regierte 16 Jahre in Jerusalem. Er folgte nicht dem Vorbild seines Vorfahren David und tat nicht, was dem Herrn, seinem Gott, gefiel, 3sondern er lebte wie die Könige von Israel. Er ging sogar so weit, dass er seinen Sohn als Opfer verbrannte. Diesen abscheulichen Brauch übernahm er von den Völkern, die der Herr aus dem Land vertrieben hatte, um es seinem Volk Israel zu geben. 4Ahas brachte auch an den Opferstätten, auf den Hügeln und unter den dicht belaubten Bäumen seine Opfer dar.

Ahas sucht Hilfe beim König von Assyrien

(2. Chronik 28,5‒8.16‒21)

5Als Ahas regierte, erklärten König Rezin von Syrien und König Pekach von Israel, der Sohn von Remalja, Juda den Krieg. Sie kamen mit ihren Heeren bis vor Jerusalem und belagerten die Stadt, konnten sie aber nicht einnehmen. 6Dafür gelang es dem syrischen König Rezin, die Stadt Elat wieder zurückzugewinnen. Er vertrieb alle Judäer aus der Stadt. An ihrer Stelle ließen sich edomitische Siedler in Elat nieder. Bis heute wohnen die Edomiter dort.

7Ahas schickte Boten zu Tiglat-Pileser, dem König von Assyrien, und ließ ihm sagen: »Ich unterwerfe mich dir und stelle mich unter deinen Schutz! Die Könige von Syrien und Israel haben mich angegriffen. Komm doch und befrei mich von ihnen!« 8Zugleich ließ er dem assyrischen König alles Silber und Gold aus dem Tempel und den Schatzkammern des Palasts als Geschenk überreichen. 9Tiglat-Pileser willigte ein. Er griff Damaskus an, eroberte die Stadt und führte die Einwohner in die Gefangenschaft nach Kir. König Rezin ließ er töten.

Ahas entweiht den Tempel

(2. Chronik 28,22‒27)

10König Ahas reiste nach Damaskus, weil er dort mit dem assyrischen König Tiglat-Pileser zusammentreffen wollte. In Damaskus sah Ahas einen Altar, der ihm sehr gefiel. Er schickte ein Modell davon an den Priester Uria, gab die genauen Maße an und beschrieb alle Einzelheiten. 11Uria baute den Altar nach dieser Vorlage und stellte ihn fertig, bevor der König aus Damaskus zurückkehrte.

12Wieder in Jerusalem angekommen, sah Ahas sich den neuen Altar an. Er stieg die Stufen hinauf 13und brachte selbst die ersten Opfer dar: Er verbrannte Brand- und Speiseopfer, goss ein Trankopfer aus und sprengte das Blut eines Friedensopfers an den Altar.

14Zwischen dem Tempel und dem neuen Altar stand immer noch der bronzene Altar, auf dem die Opfer für den Herrn dargebracht wurden. Ihn ließ der König von der Vorderseite des Tempels wegtragen und hinter den neuen Altar stellen. 15Dem Priester Uria befahl Ahas: »Von jetzt an wirst du alle Opfer auf dem großen Altar darbringen: sowohl die täglichen Morgen- und Abendopfer als auch die verschiedenen Opfer für den König und für das Volk – die Brandopfer, Speiseopfer und Trankopfer. Auch das Blut der Opfertiere sollst du nur noch an den neuen Altar sprengen. Den alten bronzenen Altar aber werde nur noch ich benutzen, wenn ich von Gott Weisungen einholen will.16,15 Oder: Was mit dem alten bronzenen Altar geschehen soll, werde ich mir noch überlegen.« 16Der Priester Uria tat, was der König ihm befohlen hatte.

17Doch König Ahas nahm noch weitere Veränderungen im Tempel vor: Er ließ die Leisten an den Kesselwagen entfernen und die Kessel abnehmen. Das große Wasserbecken aus Bronze wurde von den Rinderfiguren, die es trugen, heruntergenommen und auf einen Unterbau aus Steinen gesetzt. 18Auf Wunsch des Königs von Assyrien ließ Ahas aus dem Tempel den überdachten Platz entfernen, der für den Gottesdienst am Sabbat benutzt wurde,16,18 Oder nach der griechischen Übersetzung: die Plattform für den Königsthron entfernen. – Der hebräische Text ist nicht sicher zu deuten. und den königlichen Privateingang verschließen.

19Alles Weitere über Ahas’ Leben und seine Taten steht in der Chronik der Könige von Juda. 20Als er starb, wurde er wie seine Vorfahren in der »Stadt Davids«, einem Stadtteil von Jerusalem, beigesetzt. Sein Sohn Hiskia trat die Nachfolge an.