Génesis 34:1-31, Génesis 35:1-29 NVI

Génesis 34:1-31

Rapto y violación de Dina

En cierta ocasión Dina, la hija que Jacob tuvo con Lea, salió a visitar a las mujeres del lugar. Cuando la vio Siquén, que era hijo de Jamor el heveo, jefe del lugar, la agarró por la fuerza, se acostó con ella y la violó. Pero luego se enamoró de ella y trató de ganarse su afecto. Entonces dijo a su padre: «Consígueme a esta muchacha para que sea mi esposa».

Jacob se enteró de que Siquén había deshonrado a su hija Dina, pero como sus hijos estaban en el campo cuidando el ganado, no dijo nada hasta que ellos regresaron.

Mientras tanto Jamor, el padre de Siquén, salió en busca de Jacob para hablar con él. Cuando los hijos de Jacob volvieron del campo y se enteraron de lo sucedido, quedaron muy dolidos y a la vez llenos de ira. Siquén había cometido una ofensa muy grande contra Israel al acostarse con su hija; era algo que nunca debió haber hecho. Pero Jamor les dijo:

—Mi hijo Siquén está enamorado de la hermana de ustedes. Por favor, permitan que ella se case con él. Háganse parientes nuestros. Intercambiemos nuestras hijas en casamiento. Así ustedes podrán vivir entre nosotros y el país quedará a su disposición para que lo habiten, hagan negocios34:10 hagan negocios. Alt. se muevan con libertad. y adquieran terrenos.

Siquén, por su parte, dijo al padre y a los hermanos de Dina:

—Si ustedes me hallan digno de su favor, yo les daré lo que me pidan. Pueden pedirme cuanta dote quieran y exigirme muchos regalos, pero permitan que la muchacha se case conmigo.

Sin embargo, por el hecho de que su hermana Dina había sido deshonrada, los hijos de Jacob respondieron con engaños a Siquén y a su padre Jamor.

—Nosotros no podemos hacer algo así —les explicaron—. Sería una vergüenza para todos nosotros entregarle nuestra hermana a un hombre que no está circuncidado. Solo aceptaremos con esta condición: que todos los varones entre ustedes se circunciden para que sean como nosotros. Entonces sí intercambiaremos nuestras hijas con las de ustedes en casamiento, y viviremos entre ustedes y formaremos un solo pueblo. Pero si no aceptan nuestra condición de circuncidarse, nos llevaremos a nuestra hermana34:17 hermana. Lit. hija. y nos iremos de aquí.

Jamor y Siquén estuvieron de acuerdo con la propuesta; y tan enamorado estaba Siquén de la hija de Jacob que no demoró en circuncidarse.

Como Siquén era el hombre más respetado en la familia, su padre Jamor lo acompañó hasta la entrada de la ciudad y allí hablaron con todos sus conciudadanos. Les dijeron:

—Estos hombres se han portado como amigos. Dejen que se establezcan en nuestro país y que lleven a cabo sus negocios aquí, ya que hay suficiente espacio para ellos. Además, nosotros nos podremos casar con sus hijas y ellos con las nuestras. Pero ellos aceptan quedarse entre nosotros y formar un solo pueblo, con una sola condición: que todos nuestros varones se circunciden, como lo hacen ellos. Aceptemos su condición, para que se queden a vivir entre nosotros. De esta manera su ganado, sus propiedades y todos sus animales serán nuestros.

Todos los que se reunían a la entrada de la ciudad estuvieron de acuerdo con Jamor y con su hijo Siquén, y fue así como todos los varones fueron circuncidados.

Al tercer día, cuando los varones todavía estaban muy adoloridos, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, empuñaron cada uno su espada y fueron a la ciudad, donde los varones se encontraban desprevenidos, y los mataron a todos. También mataron a filo de espada a Jamor y a su hijo Siquén, sacaron a Dina de la casa de Siquén y se retiraron. Luego los otros hijos de Jacob llegaron y, pasando sobre los cadáveres, saquearon la ciudad en venganza por la deshonra que había sufrido su hermana. Se apropiaron de sus ovejas, vacas y asnos, y de todo lo que había en la ciudad y en el campo. Se llevaron todos sus bienes, sus hijos, sus mujeres y saquearon todo lo que encontraron en las casas.

Entonces Jacob dijo a Simeón y Leví:

—Me han provocado un problema muy serio. De ahora en adelante los cananeos y ferezeos, habitantes de este lugar, me van a odiar. Si ellos se unen contra mí y me atacan, me matarán a mí y a toda mi familia, pues cuento con muy pocos hombres.

Pero ellos replicaron:

—¿Acaso podíamos dejar que él tratara a nuestra hermana como a una prostituta?

Read More of Génesis 34

Génesis 35:1-29

Jacob vuelve a Betel

Dios dijo a Jacob: «Sube a Betel y quédate a vivir ahí. Erige allí un altar al Dios que se te apareció cuando escapabas de tu hermano Esaú».

Entonces Jacob dijo a su familia y a quienes lo acompañaban: «Desháganse de todos los dioses extraños que tengan con ustedes, purifíquense y cámbiense de ropa. Subamos a Betel. Allí construiré un altar al Dios que me socorrió cuando estaba yo en peligro y que me ha acompañado en mi camino».

Así que entregaron a Jacob todos los dioses extraños que tenían, junto con los aretes que llevaban en las orejas, y Jacob los enterró a la sombra de la encina que estaba cerca de Siquén. Cuando partieron, nadie persiguió a la familia de Jacob, porque un terror divino se apoderó de las ciudades vecinas.

Fue así como Jacob y quienes lo acompañaban llegaron a Luz, es decir, Betel, en la tierra de Canaán. Erigió un altar y llamó a ese lugar El Betel,35:7 En hebreo, El Betel significa Dios de Betel. porque allí se le había revelado Dios cuando escapaba de su hermano Esaú.

Por esos días murió Débora, la nodriza de Rebeca, y la sepultaron a la sombra de un árbol de roble que se encuentra cerca de Betel. Por eso Jacob llamó a ese lugar Elón Bacut.35:8 En hebreo, Elón Bacut significa roble del llanto.

Cuando Jacob regresó de Padán Aram,35:9 Padán Aram. Es decir, el noroeste de Mesopotamia; también en v. 26. Dios se le apareció otra vez y lo bendijo con estas palabras: «Tu nombre es Jacob,35:10 En hebreo, Jacob significa él agarra el talón (en sentido figurado: él suplanta o engaña). pero ya no te llamarás así. De aquí en adelante te llamarás Israel».35:10 En hebreo, Israel significa él lucha con Dios. Y en efecto, ese fue el nombre que le puso.

Luego Dios añadió: «Yo soy el Dios Todopoderoso. Sé fecundo y multiplícate. De ti nacerá una nación y una comunidad de naciones, y habrá reyes entre tus descendientes. La tierra que di a Abraham y a Isaac te la doy a ti y a tus descendientes». Y Dios se retiró del lugar donde había hablado con Jacob.

Jacob erigió una piedra como monumento en el lugar donde Dios le había hablado. Vertió sobre ella una ofrenda líquida, la ungió con aceite y al lugar donde Dios le había hablado lo llamó Betel.35:15 En hebreo, Betel significa casa de Dios.

La muerte de Raquel y el pecado de Rubén

Después partieron de Betel. Cuando estaban a cierta distancia de Efrata, Raquel dio a luz, pero tuvo un parto muy difícil. En el momento más difícil del parto, la partera le dijo: «¡No temas; estás por tener otro varón!». No obstante, ella se estaba muriendo y en sus últimos suspiros alcanzó a llamar a su hijo Benoní,35:18 En hebreo, Benoní significa hijo de mi aflicción o hijo de mi tristeza. pero Jacob, su padre, le puso por nombre Benjamín.35:18 En hebreo, Benjamín significa hijo de mi mano derecha.

Así murió Raquel y la sepultaron en el camino que va hacia Efrata, que es Belén. Sobre la tumba Jacob erigió un monumento, que hasta el día de hoy señala el lugar donde Raquel fue sepultada.

Israel siguió su camino y acampó más allá de la Torre del Rebaño. Mientras vivía en esa región, Rubén fue y se acostó con Bilhá, la concubina35:22 Véase nota en Gn 22:24. de su padre. Cuando Israel se enteró de esto, se enojó muchísimo.35:22 Cuando … muchísimo (LXX); Israel se enteró (TM).

Los hijos de Jacob

35:23-261Cr 2:1-2

Jacob tuvo doce hijos:

Los hijos de Lea fueron:

Rubén, que era el primogénito de Jacob,

Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zabulón.

Los hijos de Raquel fueron:

José y Benjamín.

Los hijos de Bilhá, la esclava de Raquel:

Dan y Neftalí.

Los hijos de Zilpá, la esclava de Lea:

Gad y Aser.

Estos fueron los hijos que tuvo Jacob en Padán Aram.

Muerte de Isaac

Jacob volvió a la casa de su padre Isaac en Mamré, cerca de Quiriat Arbá, es decir, Hebrón, donde también habían vivido Abraham e Isaac. Isaac tenía ciento ochenta años cuando se reunió con sus antepasados. Era ya muy anciano cuando murió; lo sepultaron sus hijos Esaú y Jacob.

Read More of Génesis 35