Salmo 78:9-16
La tribu de Efraín, con sus diestros arqueros,
retrocedió el día de la batalla.
No cumplieron con el pacto de Dios,
sino que se negaron a seguir su Ley.
Echaron al olvido sus proezas,
las maravillas que les había mostrado,
los milagros que hizo a la vista de sus antepasados
en la tierra de Egipto, en la región de Zoán.
Abrió el mar para que pudieran pasar;
mantuvo erguidas las aguas como un muro.
De día los guio con una nube
y toda la noche con luz de fuego.
En el desierto partió las rocas
y les dio a beber torrentes de aguas;
hizo que brotaran arroyos de la peña
y que las aguas fluyeran como ríos.